Editorial

BENJAMÍN BALLESTER RIESCO

El Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino es un dispositivo literario destinado a facilitar la producción y difusión del conocimiento científico de vanguardia sobre las culturas y el arte en el continente americano. En tanto aparato del saber, se halla necesariamente anclado a un lugar, un tiempo, a ciertas condiciones materiales y dentro de determinadas redes de relaciones que definen su propia existencia, identidad y alcance. Por lo tanto, cualquier iniciativa que nos lleve a superar ese estatus y esas circunstancias será para quienes estamos detrás de la revista un valioso desafío y, en ese sentido, también una motivación extra de trabajo y esfuerzo por lograr algo que hasta ahora no habíamos podido conseguir. Con esto, confieso que al Equipo Editorial del Boletín nos mueve un profundo sentimiento de superación, perfeccionamiento, crecimiento, aprendizaje y búsqueda de progreso. Ahí yace hoy, probablemente, nuestro principal motor luego de casi 40 años de historia.

No en vano comienzo el Editorial con estas palabras, pues el número al que responde constituye precisamente un excelente ejemplo de dichos esfuerzos y desafíos por crear algo nuevo y hasta ahora rupturista, no solo en la trayectoria de nuestra revista, sino incluso en el círculo de publicaciones seriadas en la que ella se desenvuelve desde sus orígenes. El Equipo Editorial del Boletín ha decidido publicar este año dos números especiales dedicados al arte y la cultura maya que reúnen en total 16 artículos de algunos de los más connotados investigadores e investigadoras de dicho campo temático a nivel mundial. Ambos volúmenes congregan a escritoras y escritores de México, España, Rusia, Finlandia, Guatemala, Francia, Estados Unidos y, por supuesto, también de Chile, en torno a diversas ramas del saber, como la antropología, la arqueología, la epigrafía, la historia del arte, la cartografía y la lingüística, así como los estudios visuales y de género, entre muchas otras.

Una obra colectiva que es única en su tipo, tanto por la materia y los trabajos que compila, como por su origen y contexto. Un proyecto diseñado, editado y publicado desde Sudamérica, el Cono Sur y Chile, pero cuyo contenido trata enteramente sobre una de las más relevantes y prestigiosas culturas mesoamericanas, lugares distantes entre sí por casi 6000 km en línea recta. Así, y gracias a la colaboración de destacados especialistas, el Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino se convierte ahora en una agencia más en la producción y difusión del saber sobre la cultura y el arte maya en la escena global. Con este gesto hemos inclinado leve, pero significativamente la balanza tradicional del sistema de producción de conocimiento en los estudios mayistas, preponderantes hasta ahora desde México, Estados Unidos y Europa, basculándola por primera vez hacia el Hemisferio Sur.

Una empresa ambiciosa que tomó varios años de gestación y que contó con el inestimable apoyo y compromiso de Macarena López Oliva, investigadora chilena con estudios de postgrado en México y España sobre temas mayas quien, con ocasión de su proyecto de investigación postdoctoral (2021-2024), se encontraba estudiando objetos de esta cultura depositados en la colección del Museo Chileno de Arte Precolombino. Sus competencias profesionales, su inserción en redes internacionales de investigación y el amplio reconocimiento de su trabajo en los círculos académicos globales especializados en este campo fueron una gran oportunidad para poner sobre la palestra del Boletín un tema tan apasionante y único en América como la escritura precolombina, un ámbito que, hasta ahora, prácticamente no habíamos podido socializar en nuestras ediciones anteriores. A esto hay que agregar que Macarena ha sido extremadamente generosa con su conocimiento y tiempo para ayudar a lo largo de todo el proceso editorial, lo que aseguró la calidad de los manuscritos y facilitó la labor del resto del equipo.

Concebida la idea, comenzamos de inmediato a pensar la obra y a convocar especialistas. Para nuestro asombro recibimos muchas más propuestas de las que esperábamos, por sobre una veintena de contribuciones que, luego del proceso de revisión editorial interna y de evaluación externa por pares ciegos, desembocaron en 16 artículos, de los cuales ponemos ahora ocho en sus manos, mientras seguimos trabajando en la edición de los restantes. En esta coyuntura vimos una oportunidad y la aprovechamos para ofrecer no uno, como estaba previsto, sino dos números especiales de ocho textos cada uno: el primero de ellos (29.1), dedicado a la iconografía y la escritura jeroglífica maya a través del estudio de ciertas manifestaciones ligadas a sus rituales, mitos y gobernantes; y el segundo (29.2), orientado a las representaciones y simbolismos de esta cultura mesoamericana desde distintos soportes, perspectivas y disciplinas.

Para el buen desarrollo de este proyecto hemos creado un protocolo estándar o convención para la lectura, traducción y presentación de los textos mayas al público. Si bien todos los escritos realizaban estas prácticas analíticas, ellos lo hacían de distinta manera y según las soluciones habituales en sus respectivas escuelas académicas y de investigación. Ante la diversidad de fórmulas generamos una norma común de traducción que fue adecuada a todos los artículos con consentimiento de sus autores y autoras, la cual será sintetizada clara y expresamente por Macarena López en su siguiente presentación editorial, junto a una breve y necesaria referencia personal a cada uno de los textos que componen el número. Hago referencia a la elaboración interna de este protocolo para exponer un ejemplo entre tantos de la larga lista de desafíos y nuevos procedimientos que el Boletín implementa al abrirse a publicar otros campos temáticos, metodologías de investigación y líneas disciplinares. Asimismo, pone en valor la necesidad que tienen revistas como la nuestra de mantener no solo altos estándares en las políticas editoriales y las normas de edición, sino también de estar abiertos a la indispensable flexibilidad ante los retos que su desarrollo requiere. Ese es el espíritu y la motivación de la revista y el equipo que le da vida.

La idea de publicar un número especial de arte y cultura maya responde también a otro importante desafío. Hace algunos años emprendimos un proceso de internacionalización destinado a expandir el alcance geográfico de los artículos que publicamos, tanto de la procedencia de sus autorías como de los temas que ellos tratan, al igual que del público que finalmente nos lee. Para este propósito hemos mantenido abierta la recepción de trabajos en inglés además de español. Estamos también reestructurando la composición y los integrantes del Consejo Editorial, ahora con presencia de académicos e investigadoras de más países, escuelas y disciplinas, precisamente para ampliar las redes de acción del Boletín. Es en este contexto, entonces, que deviene atractiva la posibilidad de publicar dos volúmenes dedicados exclusivamente a investigaciones de vanguardia sobre el mundo maya, más aún si fueron escritas por algunos de los más connotados especialistas internacionales en el tema.

La publicación de este número coincide con una muy buena noticia, pues el indicador SCImago Journal and Country (sjr), que mide la calidad de las publicaciones seriadas en todo el orbe, en su último análisis confiere la clasificación Q1 al Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino en las cuatro categorías en las que lo evalúa: Archaeology y Visual Arts and Performing Arts, ambas del área Arts and Humanities; y Archaeology y Anthropology, del área Social Sciences. Esto implica un aumento significativo en su valoración respecto a años previos, situando al Boletín entre las más prestigiosas revistas del mundo en el formato Open Access y con el más alto puesto en América Latina en las tres primeras categorías y tercero en la cuarta. Esperamos que, ampliando sus horizontes con este volumen sobre cultura maya, siga consolidándose como uno de los mejores destinos a nivel internacional para los artículos sobre arte y simbolismo precolombino y nativo americano.

Para este Boletín, pero también para el Museo Chileno de Arte Precolombino y la Universidad Adolfo Ibáñez, es un orgullo y un honor presentar este primer número especial sobre iconografía y escritura jeroglífica maya desde Latinoamérica, con los pies puestos en Chile, en alianza con investigadores e investigadoras de distintas nacionalidades, en un esfuerzo mancomunado destinado al público de todo el planeta gracias a esta revista científica digital y de acceso abierto. Ansiamos que los textos sirvan para socializar ampliamente los valiosos contenidos que presenta y, con ello, fomentar nuevos estudios, con sus respectivas interrogantes y respuestas sobre este apasionante tema. Igualmente, esperamos que este volumen se convierta en una ventana hacia otros círculos de escritoras y escritores con tal de aumentar el alcance temático, geográfico y académico de nuestra revista a nivel internacional. Un enorme esfuerzo presente que confiamos tendrá también un ingente resultado en el futuro.

Benjamín Ballester Riesco*
Equipo Editorial

 

* Editor del Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino, Santiago, Chile.
orcid: 0000-0002-7677-717X.
E-mail: bballester@museoprecolombino.cl